La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha paralizado los 7 pozos de sequía de Hellín (Albacete), como pidió el Gobierno de Castilla-La Mancha, con lo que ya no podrán seguir siendo explotados lo que queda de año y previsiblemente el que viene.
En un comunicado, el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla-La Mancha en Albacete, Manuel Miranda, ha informado de esta decisión que se adoptó ayer en la reunión de la Comisión de Seguimiento Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica.
De esta forma, el Ministerio para la Transición Ecológica ha atendido las demandas que tanto el Gobierno regional como el ayuntamiento le han hecho llegar en "numerosas ocasiones" para que finalice la extracción de agua subterránea de la provincia de Albacete y para que "en el caso de situaciones de sequía, se opte por otros recursos alternativos, como las desalinizadoras".
La batería de pozos de la CHS se hizo entre 2005 y 2009 para incrementar la disponibilidad de recursos hídricos en períodos de sequía para Murcia y Alicante.
La CHS informó de que pese a que la declaración de impacto ambiental permitía la extracción todavía durante esta campaña de 1,8 hectómetros cúbicos (hm3) de agua hasta compensar una total de 11,24, se ha decidido pararla porque la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT) no tiene necesidad de ella.
El plan de explotación para 2018 contemplaba un extracción máxima de 9,45 hm3 para la población abastecida por la MCT, volumen que se completó en septiembre.
Si las condiciones no cambian, los pozos estarán cerrados en 2019.
Miranda comunicó a la comisión que la Junta está preparando las alegaciones al estudio de impacto ambiental del proyecto de funcionamiento temporal de otros 7 pozos, en este caso privados, también en Hellín.
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