Kim Leadbeater, hermana de la diputada laborista Jo Cox, asesinada poco antes del referéndum del "brexit", alertó hoy en Edimburgo del aumento del nivel de amenazas que reciben los políticos, debido a la crispación que ha generado la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).
Leadbeater, que visitó la capital escocesa para reunirse con diputados escoceses e instarles a liderar la mejora del debate político, aseguró que percibe un incremento considerable de la crispación, desde la divisiva campaña del "brexit" en 2016.
El 16 de julio de ese año, tras participar en un acto en favor de la permanencia en el bloque común, Jo Cox, que tenía 41 años y dos hijos, recibió varios disparos y puñaladas a manos de Tommy Mair, un hombre de 52 años con problemas mentales y presuntos vínculos con círculos neonazis.
"El clima actual es particularmente preocupante, el abuso al que los políticos se enfrentan ha alcanzado altos niveles y creo que todos debemos trabajar juntos para tratar de cambiar la naturaleza de ese debate", afirmó Leadbeater en declaraciones a los medios.
Precisó que su hermana consideraría la situación actual "extremadamente perturbadora y muy triste" y enfatizó que se sentiría "decepcionada", ya que era "una gran defensora de la discusión apasionada y el debate de calidad".
"Como sabemos, muy a pesar nuestro, solo se necesita un individuo que no pueda diferenciar entre el lenguaje violento o amenazador y la acción violenta para que las vidas se desgarren", sostuvo.
Leadbeater, que afirmó no tener cuentas en redes sociales para evitar exponerse al abuso que muchas veces se sufre en ellas, destacó que es "responsabilidad" de los políticos y de toda la ciudadanía acabar con las amenazas personales o la violencia contra las mujeres que padecen aquellos con presencia en la esfera pública.
El asesinato de Cox sumergió al Reino Unido en una profunda conmoción.
En noviembre de ese mismo año un tribunal británico condenó a cadena perpetua a Mair por el "brutal y despiadado" crimen, una pena que el juez del tribunal justificó debido a la "gravedad excepcional" del delito cometido.
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