La Unión Europea ha asignado casi 1,3 millones de euros a UNICEF para atender a las poblaciones de refugiados y sus comunidades de acogida en Mauritania, informaron hoy las dos organizaciones en un comunicado conjunto.
Esta ayuda ha permitido la escolarización de 5.100 estudiantes de enseñanza primaria (la mitad niñas), para el año docente 2018-2019 y la distribución trimestral de equipos escolares individuales, según la nota emitida en Nuakchot.
Asimismo, permitió la reintegración de más de 319 estudiantes en la escuela, la formación de 130 profesores y la construcción de una nueva escuela secundaria con 10 aulas, además de una biblioteca en proceso de construcción.
Mauritania acoge a alrededor de 57.000 refugiados malienses, la mitad de ellos menores de edad, alojados en su mayoría en el campamento de M'Berra, en el extremo este del país.
"Sin la asistencia a la educación y la protección, los niños del campamento se quedarían solos y expuestos a altos riesgos, lo que se convierte en condiciones propicias para la delincuencia, los matrimonios precoces y todas las formas de violencia contra la infancia", declaró el representante de UNICEF en Mauritania, Hervé Périès, en el comunicado.
El apoyo europeo también ha ayudado a financiar actividades de educación no formal, sobre todo la alfabetización de más de 2.000 jóvenes y la formación de otros 75 en diversos oficios.
Además, unos 1.813 niños se beneficiaron de un paquete integrado de servicios de protección que incluyen acceso al estado civil, apoyo psicológico y social y ayuda para actividades generadoras de ingresos, precisó la nota.
La UE y UNICEF recordaron en su comunicado conjunto que, a pesar del progreso político y la firma de acuerdos de paz en 2015, la voluntad de regresar a su país de origen sigue siendo muy baja entre los refugiados malienses debido a la inestabilidad e inseguridad que persisten en Malí.
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