Madrid, 27 abr Tres imponentes yurtas, las viviendas representativas de los pueblos nómadas de Siberia y Asia Central, se alzan en la localidad toledana de Las Ventas con Peña Aguilera, en un paisaje que hoy se ha impregnado del folclore y las tradiciones kazajas para celebrar la primavera.
Diplomáticos de Kazajistán y representantes de sus círculos culturales han festejado, junto a los visitantes locales, en el Etnomuseo de los Pueblos de Siberia y Asia Central, el Día Internacional de Nauryz, con el que se dio inicio a la época primaveral el pasado 21 de marzo.
El ministro consejero de la embajada de Kazajistán en España, Olzhas Suleimenov, ha felicitado a los presentes en las "tierras fértiles de Toledo" en estas fiestas de "renovación, paz y creación", que constituyen un "nuevo paso exitoso" hacia el camino de acercamiento cultural bilateral.
Suleimenov ha avanzado que este es un "año especial", puesto que el doce de julio se conmemora el décimo aniversario del acuerdo de colaboración estratégica entre la república asiática y España, en un periodo en el que la embajada kazaja "trabaja para profundizar" esta relación.
Además del Nauryz, la jornada ha celebrado también el Día de la Unión de los Pueblos de Kazajistán, que tendrá lugar el próximo uno de mayo, coincidiendo con la celebración del Día del Trabajador en nuestro país.
Por su parte, la antropóloga y especialista en el estudio de los pueblos de Siberia y Asia Central, Carmen Arnau, ha señalado que el objetivo de estos encuentros interculturales, que cumplen su decimotercera edición, es "acercar unos pueblos con otros" a través de actividades "lúdicas y divertidas".
Junto a las representativas yurtas de Kazajistán, Buriatia y de la república de Jacasia, el público ha podido descubrir fragmentos musicales kazajos a través de los acordes de la dombra, el instrumento de cuerda propio, y vislumbrar los colores de los trajes festivos, en los que llaman la atención un puntiagudo gorro llamado saukele.
El valor divulgativo del etnomuseo se complementa con otros proyectos científicos impulsados por la Fundación Carmen Arnau, como "exposiciones etnográficas y foros" entre los que destaca el 'I Congreso Antropológico Internacional sobre los Pueblos de Siberia y Asia Central', que tuvo lugar ayer en la localidad toledana de Polán.
A 20 kilómetros del etnomuseo, Polán dispone también de un espacio expositivo que concentra en 120 metros cuadrados diversos materiales como "adornos en plata, instrumentos musicales y diferentes fotografías", ha añadido Arnau.
Los visitantes han degustado dulces y platos típicos kazajos como el plov, un guiso de arroz con carne estofada, en una fiesta de unión cultural entre los dos países, que ha contado entre otras actividades, con un rito kazajo y una representación teatral infantil.
dgm
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