La agencia que gestiona la entrega de fondos de la Unión Europea en Letonia ha suspendido el pago de unos 66 millones de euros a la compañía de transporte público de Riga, envuelta en un caso de corrupción del que hoy se distanciaron dos destacadas instituciones bancarias.
La Agencia Central de Financiación y Contratación (CFLA, por sus siglas letonas) suspendió el jueves la entrega del dinero a la compañía de transporte público de Riga, Satiksme (RS) citando las fuertes sospechas de corrupción en sus procedimientos de licitación.
Un portavoz de la CFLA dijo que la agencia examinó una auditoría confidencial de RS realizada por la firma Ernst & Young que les convenció de que había que cortar la entrega del dinero comunitario.
El escándalo se conoció en diciembre, cuando agentes anticorrupción llegaron a RS y a las oficinas del alcalde y vicealcalde de Riga; el responsable de RS fue detenido y puesto en libertad bajo fianza, su directiva destituida y fueron arrestados en Letonia y Polonia responsables de Skoda y Solaris, empresas suministradoras de equipos.
Portavoces del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y del Banco Nórdico de Inversiones (NIB), que se habían comprometido a financiar la mayor parte de los 270 millones de euros del plan de renovación de RS, declararon hoy a Efe que esas instituciones están firmemente en contra de cualquier vínculo con casos de corrupción.
Uno de ellos, que pidió el anonimato, dijo que las entidades internacionales no dirán ni harán nada que alimente la especulación y que pueda interrumpir el servicio público de transporte en la capital letona mientras se busca una solución.
En caso de quiebra de RS, el Ayuntamiento de Riga podría verse obligado a rescatarla.
Vilnis Kirsis, miembro de la Alcaldía por el partido opositor y centrista Unidad, declaró que la única manera de evitar un escenario de pesadilla sería la disolución del Ayuntamiento y la celebración de elecciones, de modo que se evite a la capital letona la sombra de sospecha mientras se negocian los próximos presupuestos de la Unión Europea.
Kirsis agregó que a la luz de la investigación sobre corrupción abierta en 2018 hay pocas esperanzas de que se aprueben nuevos proyectos en torno a RS o a Riga, cuyas próximas elecciones municipales están previstas en 2021.
El alcalde de Riga, Nils Usakovs, fue destituido recientemente, pero tanto sus colaboradores como sus aliados políticos del partido socialdemócrata Harmony siguen en sus puestos en el Ayuntamiento.
Un portavoz de la CFLA dijo que la ruptura del contrato con RS puede hacer que el dinero del Fondo de Cohesión se dirija a otros proyectos que determine el ministerio de Transporte, y el titular de este, Talis Linkaits, ha declarado que ya está buscando usos alternativos.
La financiación comunitaria cancelada por la CFLA estaba destinada a financiar la construcción de una nueva línea de tranvía en un barrio de Riga y el suministro de 12 convoyes; la línea tendría que discurrir cerca de un histórico cementerio y a ella se oponen grupos ciudadanos porque ven el proyecto como una profanación.
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