El grupo industrial Cortizo ha marcado un máximo de ventas el pasado año, tras alcanzar los 636 millones de euros de facturación, con lo que supera por primera vez en su historia la barrera simbólica de 600 millones.
La multinacional gallega con sede en Padrón (A Coruña), dedicada a la fabricación de perfiles de aluminio y de policloruro de vinilo (PVC) ha registrado un volumen de negocio un 14,8 % al de 2017, cuando habían alcanzado 554 millones de euros, según un comunicado.
Asimismo, el porcentaje de ventas en el exterior se situó en el 70 % llegando a 60 países, con Alemania, Francia y Reino Unido como principales mercados.
El grupo Cortizo, propiedad de la familia de ese nombre, dispone de factorías en Polonia, Eslovaquia y Francia, además de España, y de participaciones en otras empresas.
Fuentes del grupo consultadas por Efe han indicado que no "suelen facilitar habitualmente datos" sobre sus beneficios en España u otros países.
Según el comunicado, el grupo tuvo el año pasado un crecimiento de su producción que alcanzó 81.178 toneladas de perfilería de aluminio (+7 %) y de 1.340.000 barras de PVC (+39,9 %).
El incremento de las ventas y de la producción repercutió en la creación de 286 nuevos puestos de trabajo, una tendencia que ha continuado en los primeros meses de este año, en los que se han generado 119 empleos, añade la nota.
En la actualidad, la plantilla asciende a 3.205 empleados, de los que 1.663 desempeñan su trabajo en Galicia, subraya.
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