Agentes especializados de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional se desplazarán a Pamplona para prevenir acciones contra la libertad e integridad sexual durante los Sanfermines, en el marco del "Plan verano seguro 2019".
Según informa la Policía en un comunicado, en el operativo del verano participarán más de 23.000 agentes, que se centrarán en las zonas turísticas y en las ciudades que celebran festejos, como la capital navarra, donde se intensificará la seguridad de espectáculos y acontecimientos con gran afluencia de personas y las medidas de prevención antiterrorista.
La plantilla se reforzará con 700 efectivos que trabajarán durante los Sanfermines con unidades de caballería, guías caninos, medios aéreos, la unidad de subsuelo, agentes uniformados de Italia y Francia que patrullarán junto a los españoles, refuerzo de agentes policiales de la Embajada americana y antidisturbios de Bilbao, además de los agentes especializados de la UFAM.
Ante la buena acogida de ediciones anteriores, apunta la Policía, se volverán a repartir pulseras identificativas para los menores.
Los Sanfermines comienzan este fin de semana y serán también días de mucha actividad en Madrid con la celebración de las Fiestas del Orgullo 2019, para el que la Policía ha diseñado un dispositivo de 1.000 agentes que comenzó ya el día 3.
Destaca la participación de la Brigada Provincial de Información con su Grupo de delitos de odio, encargado de intervenir en aquellos incidentes provocados por un prejuicio basado, entre otros motivos, en la orientación e identidad sexual de la víctima.
Al margen de las fiestas, el "Plan verano seguro" refuerza la vigilancia de las principales vías de comunicación, estaciones, puertos, aeropuertos, hoteles, playas o cualquier zona de alta concentración turística.
Madrid y Andalucía son las comunidades que contarán con más agentes de refuerzo -7.598 y 6.059, respectivamente- pero el despliegue también se realizará en la Comunidad Valenciana, Canarias, Galicia, Asturias, Baleares, Murcia y Cantabria.
El plan dota además de más medios a las "servicios de atención al turista extranjero" que trabajan en los principales puntos turísticos y donde las víctimas de un delito son atendidos en sus idiomas por agentes especializados e intérpretes.
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