Las analíticas realizadas tras el vertido en Montüiri de poliol, material con el que se logra la espuma para la fabricación de colchones, descartan que el agua del pozo afectado sea peligrosa para el medio ambiente, ha asegurado la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio.
Los directores generales de Residuos y Recursos Hídricos del Govern se han reunido este martes con el alcalde y vecinos de Montuïri para explicarles los resultados tras el vertido ilegal en la antigua fábrica espumador Balear.
La analítica se ha hecho en 149 compuestos químicos y se ha descartado la ecotoxicidad del agua del pozo que hay en el edificio.
De estos casi 150 compuestos, todos se encuentran por debajo del límite de detección, con la excepción de ocho compuestos de la familia de los polioles, unos compuestos que, si bien pueden causar irritación en la piel o en los ojos -concentrados y al manipularlos directamente- no aparecen calificados como cancerígenos o tóxicos graves.
Entre los que están por debajo del límite se encuentran, entre otros, el estaño, restos de isocianato de tolueno o sus productos derivados (poliurea).
En cuanto a la ecotoxicidad, la muestra ha dado un resultado negativo, lo que significa que no afecta al medio ambiente ni a los animales.
No obstante, la dirección general de Recursos Hídricos establecerá los controles y analíticas necesarias sobre los pozos vecinos.
Estas analíticas tienen dos objetivos principales: por un lado, ver el posible nivel de toxicidad del agua del pozo con el fin de identificar un peligro para la salud de las personas y el medio ambiente que pudiera extenderse a los pozos de los vecinos.
Por otra parte, identificar si se han vertido productos que aún se encuentran almacenados en bidones de la nave.
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