La dirección general de Ordenación y Regulación Sanitaria del departamento de Salud ha abierto un expediente a un centro médico privado, del que no ha facilitado el nombre, a raíz de la denuncia de un particular que le solicitó hacerse un test para detectar la COVID-19.
Fuentes del departamento de Salud han informado hoy martes de la apertura de este único expediente, de momento, tras detectarse que varios centros médicos privados ofrecían pruebas PCR a particulares a precios cercanos a los cien euros.
El gobierno catalán aprobó a finales de marzo una resolución en la que se indicaba que las pruebas PCR se debían poner a disposición del sistema de salud público de Cataluña, que ahora se refuerza con una orden del Gobierno que publica hoy martes el Boletín Oficial del Estado (BOE).
En esta orden del BOE se establece que "las comunidades autónomas tendrán a su disposición los centros, servicios y establecimientos sanitarios de diagnóstico clínico de titularidad privada".
La consellera de Salud, Alba Vergés, ha considerado hoy martes en rueda de prensa tras la reunión semanal del consell executiu que el BOE "reafirma lo que ya habíamos aprobado en marzo", y es que todos los laboratorios privados han de estar bajo la supervisión del sistema de salud de Cataluña.
Vergés ya admitió el pasado día 8 de este mes en el Parlament de Cataluña de que tenía conocimiento de que algunos centros privados vendían pruebas para detectar la COVID-19.
Los centros privados están obligados a notificar al departamento de Salud todos los casos positivos de coronavirus que hayan diagnosticado hasta ahora, algunos encargados por ayuntamientos y residencias de ancianos privadas.
Según los datos facilitados hoy por la consellera, en Cataluña se han hecho hasta este martes 10.434 pruebas PCR en las residencias de ancianos y el objetivo es conseguir realizar unas 1.500 por día.
"Esperamos que en unos trece o quince días tengamos los datos de las residencias" y también de los profesionales que trabajan en ellas, lo que dará un 'mapa' completo de la situación en estas instalaciones, ha indicado la consellera.
Cataluña suma 1.898 ancianos fallecidos por la COVID-19 desde el inicio de la pandemia y tiene a otros 3.920 que son positivos, según los datos de Salud.
-
No se ha podido acceder al contenido, vuelve a intentarlo más tarde.