La República Checa ha decidido regular desde este viernes el precio de los test de coronavirus, que pasarán a costar como máximo 67 euros, informó hoy el ministro de Sanidad, Adam Vojtech, en su cuenta personal de Twitter.
Esos test, diseñados para detectar existencia de anticuerpos contra el COVID-19 y que se pueden obtener en laboratorios privados o entes de sanidad pública, pueden en la actualidad llegar a costar hasta 120 euros.
Los checos que deciden viajar al exterior, sobre todo por razones profesionales, deben presentar en el país de destino un diagnóstico negativo para evitar quedar recluidos en cuarentena, y lo mismo deben hacer al regresar al país centroeuropeo.
Esto ha encarecido el movimiento de personas que cruzan la frontera, y generado numerosas protestas entre los que conmutan a países vecinos para trabajar.
"Los test para personas que no son financiados por el seguro son la mayoría. Queremos que tengan un precio razonable y no surjan muchas diferencias en las tarifas", dijo Vojtech en la red social.
La regulación del precio será aplicable para personas que solicitan el test por cuenta propia o para órganos de la administración.
En la República Checa, de una población de 10,5 millones de personas, hay actualmente 8.330 casos confirmados de cornavirus, y han fallecido 292 pacientes.
Noticias relacionadas
-
No se ha podido acceder al contenido, vuelve a intentarlo más tarde.