La ciudad de Reus (Tarragona) extrema las precauciones ante el incremento de contagios de covid-19 y las advertencias del aumento de riesgo lanzadas por varios investigadores, según informa el consistorio.
El riesgo de rebrote, advierte el grupo Biocom-SC de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), ha pasado en una semana del 57,14 al 105,14 en el Camp de Tarragona penalizado por Reus, donde la tasa se sitúa en 273,40.
Ante estos indicadores de riesgo, Reus ha reforzado los educadores ambientales para concienciar de las medidas de distancia social, mascarilla y lavado frecuente de manos.
También la Guardia Urbana incrementa las visitas a bares y restaurantes para recordar las medidas y sancionar si no se cumplen.
Además, la policía municipal controlará que no haya botellones masivos, como el frustrado este pasado fin de semana con un dispositivo conjunto con los Mossos d'Esquadra.
El origen de los contagios, según el Ayuntamiento, son las aglomeraciones y celebraciones sociales en la vía pública.
El alcalde en funciones, Dani Rubio (Ara Reus), avisa de que sancionarán estos focos con la multa más alta que puedan porque es un "atentado contra la salud pública".
Salud no descarta, según Rubio, cribados masivos para controlar la situación, una medida que ya ha pedido el grupo municipal de la CUP, en la oposición, según informa el partido anticapitalista.
La CUP, además, pide un trabajo conjunto de todos los grupos municipales con los agentes económicos, sociales y culturales para afrontar la crisis sanitaria.
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